A medida que las economías mundiales se recuperaron de la pandemia de Covid-19, hubo un aumento explosivo en la necesidad de electricidad. ¡Los estudios muestran que la cantidad de electricidad utilizada en 2021 fue equivalente a agregar otra India a la red!
La demanda de electricidad aumentó un 5,4% en 2021, el crecimiento más rápido desde 2010, con la energía del carbón cubriendo el 59% de ese aumento. Las fuentes de energía limpia como la energía solar, eólica, geotérmica e hidroeléctrica están ayudando a satisfacer la necesidad y representan el 38 % del suministro mundial de electricidad.
Las energías eólica y solar, en particular, han crecido más rápido. ¡En 2021, la energía solar y eólica alcanzaron un récord del 10 % del suministro mundial de energía para más de 50 países! Profundicemos más en el panorama energético actual.
Energía eólica y solar
Holanda, Australia y Vietnam son los países que lideran la adopción de energías limpias. Cada una de estas naciones ha reemplazado más del 8% de su electricidad de combustibles fósiles con energía eólica o solar en los últimos dos años.
Vietnam ha logrado esto mediante la implementación de tarifas de alimentación: este es el dinero que el gobierno paga a las personas para producir electricidad para abastecer la red. Esto ha hecho que la energía solar sea más atractiva para los hogares e instituciones del país.
Los Países Bajos, ubicados cerca del polo norte, han demostrado que la cantidad de luz solar que recibe un país no es el único factor en el éxito de la energía solar. La adopción de la energía solar también depende de la voluntad del gobierno de desarrollar políticas ambiciosas de energía limpia.
La energía eólica y solar pueden ayudar a mitigar la crisis climática, dado que son las que menos cuestan producir. La generación de energía eólica y solar debe aumentar en más de un 20% anual hasta 2030 para evitar que las temperaturas globales promedio superen los 1,5 ℃. En otras palabras, ¡estas tecnologías necesitan crecer mucho más rápido que durante todas las décadas pasadas!
Sin embargo, el crecimiento de estos sectores y el aumento de la producción de energía requerirán la actualización de la red. La red debe poder acomodar múltiples fuentes de energía y tener una forma de almacenar el exceso de energía. Aquí es donde una nueva tecnología de almacenamiento llamada MOST (abreviatura de Molecular Solar Thermal) Energy Storage Systems puede resultar prometedora.
¡Una innovación emocionante!
Los investigadores han estado desarrollando una tecnología que permitiría almacenar y acceder a la energía solar durante más de 18 años.
MOST utiliza una molécula especial compuesta de carbono, hidrógeno y nitrógeno. Cuando esta molécula entra en contacto con la luz solar, forma un isómero que retiene la energía. Un isómero de una molécula está hecho de los mismos átomos, pero los átomos están dispuestos de manera diferente, lo que cambia las propiedades químicas de la molécula original. Cuando se libera la energía, la molécula vuelve a su forma original, lo que permite reutilizarla.
Al conectar MOST a un generador termoeléctrico, el sistema puede producir electricidad a partir del calor. La ventaja de un sistema de este tipo es que podría producir energía solar independientemente del clima, la hora del día, la estación o la ubicación geográfica. Sin embargo, se necesita más investigación para hacer que el sistema sea más eficiente antes de que esto pueda convertirse en una realidad.
¡Sigamos atentos a la innovación continua en el sector de las energías limpias! Seguramente será fundamental para satisfacer nuestras crecientes demandas de energía y asegurar un futuro con energía limpia.
Fuentes: BBC, SciTech, ember-climate.org