Después de las recientes tormentas de invierno que azotaron el sureste de los Estados Unidos, gran parte del suelo quedó cubierto con montones de nieve.
Con condiciones de conducción peligrosas causadas por las condiciones extremadamente heladas, los funcionarios recurrieron a la solución tradicional de sal para mantener las calles despejadas.
Sin embargo, existe una creciente preocupación por los efectos adversos de la sal para carreteras, ya que la sustancia química no solo contamina el medio ambiente sino que también afecta la salud de las personas.
Como resultado, los científicos están instando a los funcionarios a buscar una alternativa más segura y "ecológica".
El impacto de la sal para carreteras
La sal para carreteras es una sal hecha del compuesto químico cloruro de calcio. Se usa comúnmente para descongelar las carreteras durante el invierno al reducir el punto de congelación del agua, lo que dificulta que el agua y la nieve se congelen en la carretera.
Los científicos ambientales como Bill Hintz, que han realizado estudios de seguridad, muestran que la sal de las carreteras ha estado contaminando los ecosistemas de agua dulce. Los estudios también han encontrado un aumento significativo en la salinidad de las áreas de drenaje en los Estados Unidos debido al uso excesivo de sal para carreteras.
Un aumento de la sal en los ecosistemas puede interrumpir el crecimiento y desarrollo de los organismos acuáticos y disminuir los niveles de oxígeno en los cuerpos de agua. La acumulación de sal en ríos y arroyos es tóxica no solo para las criaturas acuáticas sino también para los humanos. La sal del camino en la escorrentía de los ríos a menudo conduce a agua potable más salada, lo que puede ser peligroso para el consumo, especialmente para las personas con dietas bajas en sodio.
Alternativas Sostenibles
Aunque no existe una solución perfecta para el problema de la sustitución de la sal para carreteras, se están desarrollando métodos innovadores para reducir la cantidad de sal que se esparce en las carreteras.
Una de esas alternativas pre-sal las carreteras con una solución de salmuera, que según los científicos conduce a una disminución del 75 por ciento en la cantidad de sal utilizada.
Los ingenieros están desarrollando nuevas soluciones que no involucran sal en absoluto, incluidos pavimentos porosos y caminos solares. Los pavimentos porosos o permeables evitan la acumulación de hielo en las carreteras al permitir que el agua se filtre en lugar de congelarse en la superficie.
Las carreteras solares, por otro lado, podrían duplicarse como fuentes de energía renovable y descongeladores ecológicos. Los paneles solares especialmente diseñados a lo largo de las carreteras convertirían la energía del sol en energía renovable y calentarían el agua en las tuberías debajo de las carreteras para derretir el hielo que se forma.
Otros lugares en los EE. UU. ya están empleando alternativas ecológicas, ¡algunas de las cuales son bastante poco convencionales! Por ejemplo, muchas ciudades ahora usan líquidos como jugo de remolacha, salmuera de pepinillos e incluso salmuera de queso como método biodegradable para poner sal en las carreteras.
Fuentes: NY Times, Columbia.edu, EPA, Vox