Si has estado en el Amazonas, es posible que te hayan cautivado los frondosos bosques y la plétora de especies. Ahora, ¿te imaginas que el Ártico alguna vez fue así?
De hecho, el material genético de hace dos millones de años sugiere un ecosistema excepcional. Los investigadores que analizaron los sedimentos del Ártico descubrieron pruebas de ADN de 100 géneros de plantas (grupos de especies) y nueve taxones de animales (una unidad utilizada para clasificar animales).
Examinemos qué significa el descubrimiento y qué indican los hallazgos sobre la Tierra.
El descubrimiento
Eske Willerslev, genetista evolutivo y profesor de la Universidad de Cambridge, recolectó sedimentos de un fiordo en Groenlandia en 2006.
El área, conocida como Formación Kap Kobenhavn, había producido previamente fósiles de plantas de hace 2,4 millones de años. Pero la tecnología para el análisis de ADN no estaba madura en ese entonces: los resultados de los análisis de sedimentos no mostraron ningún signo de vida.
Más recientemente, otro intento de analizar los mismos sedimentos utilizando tecnología de extracción de ADN de última generación tomó a los científicos por sorpresa. Las muestras no solo estaban repletas de ADN vegetal y animal, sino que también había evidencia de vida marina, como cangrejos herradura, así como la existencia de liebres, gansos, lemmings y algas. ¡El descubrimiento más intrigante fue la presencia de un mastodonte, un pariente del elefante!
¿Cómo determinaron los investigadores que el sedimento tenía dos millones de años? Al analizar los minerales en el sedimento, encontraron patrones que indicaban que el campo magnético de la Tierra se había invertido. Según la edad de las inversiones, concluyeron que Kap Kobenhavn tenía al menos dos millones de años.
¡Un planeta más cálido!
La flora y la fauna que se descubrieron en los sedimentos son típicas de los bosques boreales más al sur. Los bosques boreales están compuestos por árboles de coníferas (pino, abeto y abeto) y especies de hoja ancha (álamos y abedules). Los bosques boreales también son el bioma más grande del mundo, representan el 30% de los bosques mundiales y se extienden por tres continentes.
Los sedimentos de dos millones de años mostraron la presencia de especies de hoja ancha. Los cangrejos que se encuentran en los sedimentos del Ártico se encuentran hoy al norte de Maine. Finalmente, se cree que los mastodontes habitaron principalmente América del Norte y Central durante los períodos del Mioceno (hace 5 a 23 millones de años), Plioceno (hace 2 a 5 millones de años) y Pleistoceno (hace 12,000 años a 2 millones de años). Ahora parece que estos gigantes prehistóricos habían emigrado más al norte.
En general, este descubrimiento sugiere que el Ártico tenía un clima mucho más cálido hace dos millones de años, con temperaturas entre 10 y 17 grados centígrados más altas que las actuales. El estudio también ayudará a los investigadores a trazar un mapa de cómo las plantas y los animales podrían propagarse en un Ártico en calentamiento debido al cambio climático.
Fuentes: NY Times, Washington Post, Smithsonian, BBC, LiveScience