Sabemos que los gases de efecto invernadero son los culpables del aumento de las temperaturas globales y el cambio climático. Pero, ¿cómo podemos detectar exactamente quién los está emitiendo y cuánto?
Hasta ahora, los científicos han tenido que confiar en los datos de los propios contaminadores, muchos de los cuales eran inexactos, no verificables y muy a menudo con años de retraso.
Ahora, la nueva tecnología está ayudando a abordar esta pregunta. Climate Trace es un rastreador global que utiliza datos de satélites y sensores junto con tecnología informática sofisticada. Averigüemos más y cómo se puede usar esta información.
Cómo funciona el rastreo climático
Satélites como GOSAT y OCO-2 (Observatorio Orbital de Carbono) orbitan la tierra y rastrean las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera. Climate Trace comenzó en 2019 con la pregunta: "¿Podemos usar estos datos satelitales globales para identificar las fuentes de las emisiones de efecto invernadero?"
Actualmente, Climate Trace utiliza datos de casi 300 satélites, 11 000 sensores en tierra, aviones y barcos, así como fuentes adicionales de todo el mundo. Actualmente, está rastreando 72,000 de los mayores emisores de gases de efecto invernadero. Se centra especialmente en la industria del petróleo y el gas, que es el mayor emisor de gases de efecto invernadero desde la extracción hasta la refinación y el transporte de combustibles fósiles. ¡En 2021, este sector fue responsable de 11 mil millones de toneladas de emisiones de gases de efecto invernadero!
Dado que los gases de efecto invernadero se mezclan en la atmósfera, la información sin procesar de los satélites y sensores debe combinarse con inteligencia artificial sofisticada y tecnología de aprendizaje automático para dar sentido a los datos. Climate Trace rastrea el dióxido de carbono, el metano y el óxido nitroso, y la información está disponible en tiempo real y es accesible para todos.
¿Qué muestran los datos?
Climate Trace se puede utilizar para identificar campos de petróleo y gas que son grandes emisores o que producen barriles de petróleo sucios.
Los barriles de petróleo se consideran sucios si el proceso de producción libera gas metano intencionalmente a través de la quema o si hay fugas no intencionales en las tuberías. El metano, como vimos en este artículo, tiene un efecto de calentamiento global mucho mayor que el dióxido de carbono.
¡Con Climate Trace, mentir será más difícil! La herramienta ya ha demostrado que la industria del petróleo y el gas ha estado subestimando sus emisiones; de hecho, pueden ser tres veces más altas de lo que le han estado diciendo a las Naciones Unidas. Específicamente en los Estados Unidos, los productores de petróleo y gas han subestimado la cantidad de metano que han estado liberando.
Según Al Gore, ex vicepresidente y defensor de la acción climática, el 75 % de las emisiones de gases de efecto invernadero del mundo provienen de países que prometieron ser neutrales en carbono (sin emisión neta de CO2) para 2050. Espera que este rastreador les permita cumplir su promesa.
Fuentes: RMI.org, Climate Trace, NPR, Guardian